DIA 18

Día 18:

ORACIÓN EN FAMILIA

Cita para memorizar: Salmos 127:1

"Si Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guarda la ciudad, en vano vela la guardia."

Todos trabajamos por tener el mejor hogar, solo que a veces lo hacemos a nuestra manera. Buscamos la major casa, con los mejores carros, la mejor ropa, la mejor tecnología y la mejor apariencia; cuando lo más importante es el carácter y la salvación de nuestra familia. Necesitas poner ese cerco de protección cada mañana con los tuyos.

No salgan del hogar sin leer tu matinal con alabanza y oración. Solo necesitas reunirlos de 10 a 15 minutos y deja que Jehová construya tu casa y les de su bendición.

La oración en el círculo del hogar: Padres y madres, por muy urgentes que sean vuestros negocios, no dejéis nunca de reunir a vuestra familia en torno del altar de Dios. Pedid el amparo de los santos ángeles para vuestra casa. Recordad que vuestros amados están expuestos a tentaciones. Or 2272

Por la mañana, los primeros pensamientos del cristiano deben fijarse en Dios. Los trabajos mundanales y el interés propio deben ser secundarios. Debe enseñarse a los niños a respetar y reverenciar la hora de oración... Es el deber de los padres creyentes levantar así, mañana y tarde, por ferviente oración y fe perseverante, una valla en derredor de sus hijos. Deben instruirlos con paciencia; enseñándoles bondadosa e incansablemente a vivir de tal manera que agraden a Dios.—Conducción del Niño, 491, 492

En cada familia debería haber una hora fija para los cultos matutino y vespertino. ¿No conviene a los padres reunir en derredor suyo a sus hijos antes del desayuno para agradecer al Padre celestial por su protección durante la noche, y para pedirle su ayuda y cuidado durante el día? ¿No es propio también, cuando llega el anochecer, que los padres y los hijos se reúnan una vez más delante de Dios para agradecerle las bendiciones recibidas durante el día que termina?—Conducción del Niño, 492

Puntos de oración:

  •     La unción del Espíritu Santo.
  •     Que Dios ocupe el lugar más importante en el corazón de cada Familia de la Iglesia.
  •     Que la familia siga siendo esa comunidad de amor, conforme al diseño de Dios.